Gracias a la FUNDACIÓN REPSOL pudimos subvencionar parte de las terapias con caballo en estos dos últimos años y esperamos poder seguir haciendolo en el futuro inmediato.
Gracias a esta subvención las familias de cualquier punto de Galicia escogemos el centro ecuestre al que queremos llevar a nuestros hijos e hijas, lo que nos resulta muy cómodo porque así nos adaptamos a nuestro lugar de residencia.
La terapia con caballos ha demostrado ser una actividad estimulante y gratificante, a la que acuden con ganas e ilusión, no la sienten como trabajo, pero sí lo hacen, sin ser conscientes de ello pues cuando están encima del caballo disfrutan, no piensan en ningún momento todo el trabajo motriz que implica mantenerse sobre el animal y su sonrisa confirma a las familias que es una gran terapia.
Como muestra.......